"HOLA SOY EDU, ¡FELIZ NAVIDAD!"

¿Recordais el anuncio? Con esa sencilla cantinela, Airtel consiguió que todo el país hablara de ella durante las fiestas de 1997. El pequeño repipi llamaba a todos los conocidos con el teléfono móvil de su padre y no fueron pocos los chavales españoles que le imitaron en la vida real. Diez años después, ya no es necesario hablar con los amigos y familiares para felicitarles. Si lo que desea es hacerles llegar un recado tan conciso como el del modoso Eduardo, el servicio de mensajes cortos es la opción más cómoda y extendida. Se calcula que cada español habrá enviado una treintena de estos textos a través de su móvil desde Nochebuena hasta Reyes.

El móvil se ha consolidado como el medio que los españoles más emplean para felicitar las fiestas navideñas. En concreto, las operadores de este tipo de telefonía esperan que durante la Nochevieja se envíen unos 100 millones de SMS, que sumados a todos los que los ciudadanos enviarán durante estas fechas alcanzarán la cifra de unos 200 millones de mensajes cortos, y yo diría que en estas fiestas, que son tremendamente comerciales las que verdaderamente se forran son las compañías telefónicas, ya que ingresarán unos ¡¡20 millones de euros!!.

El día 24, la red de Movistar soportó el envío de unos 12 millones de mensajes entre las 20 y las 21 horas; y no fueron más porque el sistema se colapsó.
El año anterior fueron más, casi 13 millones.
Entre las últimas campanadas de Nochevieja y la 1 de la madrugada se cruzaron 21 millones de llamadas y 18 millones de mensajes. Por consiguiente,(dado que Orange, Euskaltel y Vodafone controlan el otro 50% del mercado celular en España), unos 42 millones de móviles sonarán al compás del repique del reloj de la Puerta del Sol.

Esta fiebre por mandar mensajes felicitando las fiestas se hace insostenible y muchos usuarios experimentan cada año problemas a la hora de mandarlos.
En Nochebuena, muchos usuarios vieron cómo sus terminales eran incapaces de conectarse con la red, mientras que al rato los mensajes eran entregados por triplicado. Y en Nochevieja, como cada año, será peor...

Eso sí, cada año los mensajes son más ingeniosos.Los hay románticos: «No esperes que te olvide, ni olvides que te espero... Feliz Año». Picantes: «Si un hombre vestido de rojo se mete en tu cama, dile que yo lo que pedí para ti es un Volvo». Irónicos: «¿Enhorabuena! Has sido seleccionado para tirar del trineo de Papá Noel. Dentro de poco pasará un enano para medirte los cuernos». Reivindicativos: «Manifiéstate en contra de los Reyes Magos, no queremos más colonias, ni bufandas ni pijamas. Pásalo». Realistas: «Aviso a toda la población: el simulacro de Paz y Amor ha finalizado. Guarden los langostinos, insulten a sus cuñados y disuélvanse»...
Pero tampoco te emociones, sólo el 12% son mensajes personalizados. Más de la mitad de las personas que envían sms navideños lo hacen a través de la cómoda y automática fórmula del reenvío a los números de sus allegados y como no podía ser menos, Edu también tiene el suyo:
«Hola, soy Edu. He cumplido 18 y estoy en una clínica de desintoxicación . El dinero rápido no hace la felicidad. Confórmate con seguir ganándolo lentamente».

Yo os dejo el anuncio original, ya que Edu es el culpable directo de que en estas fechas nos volvamos locos por mandar mensajes, hasta parecer que nuestro dedo ha adquirido vida propia.

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